Gracias a la unión entre la Fundación EPM, Fundación Luker y Luker Chocolate en el Centro Educativo Rural Alto Carito, perteneciente a la Institución Educativa Rural Caribia, del municipio de Necoclí, fue instalada una solución de potabilización de agua.
El agua potable llegó a la vereda Alto Carito del municipio de Necoclí, beneficiando a por lo menos 200 habitantes de esta región antioqueña.
Gracias a la unión entre la Fundación EPM, Fundación Luker y Luker Chocolate en el Centro Educativo Rural Alto Carito, perteneciente a la Institución Educativa Rural Caribia, del municipio de Necoclí, fue instalada una solución de potabilización de agua.
En 2022, la Fundación Luker impactó a más de 20.000 estudiantes de todo el país a través de la implementación de programas como Escuela Activa.
La Fundación EPM sigue mejorando la calidad de vida de miles de estudiantes del país gracias al programa Agua para la Educación, Educación para el Agua, que ya impacta a 96.000 personas.
Esta iniciativa está enmarcada dentro de “El Sueño de Chocolate”, el plan colaborativo de sostenibilidad de Luker Chocolate con el que la empresa busca transformar la cadena de valor del cacao desde el origen, con el que se impactó positivamente a más de 3.000 familias en 2022.
Necoclí (Antioquia), junio 15 de 2023. A principios de 2023 la Fundación EPM, la Fundación Luker y Luker Chocolate, se unieron con el objetivo de transformar la vida de las personas que habitan la vereda Alto Carito del municipio de Necoclí, ubicada en el Urabá antioqueño. Hoy, esta unión de voluntades tiene sus primeros frutos, porque gracias al trabajo articulado, la Institución Educativa Rural Caribia sede Centro Educativo Rural Alto Carito cuenta con una solución de potabilización de agua, que aportará al mejoramiento de las condiciones de salud y bienestar de esta comunidad.
Esta solución permite que por lo menos 50 beneficiarios directos, especialmente estudiantes y el docente de la institución educativa, tengan agua potable, así como más de 150 personas que habitan en las cercanías de la institución educativa tengan acceso a este recurso que mejorará su calidad de vida.
“La falta de acceso al agua potable representaba muchos retos para la prestación de servicio educativo. En ocasiones debíamos recortar horarios cuando no había agua y teníamos veranos extensos y no había cómo hacer aseo o cómo preparar alimentos. Debíamos recortar la jornada para que los niños no tuvieran que hacer sus necesidades en la institución y en frente a la preparación de alimentos, los niños o sus padres tenían que turnarse para traer agua de sus casas o de otros de otras fuentes. Entonces siempre afecta directamente tanto a la salud como la prestación del servicio educativo el hecho de no contar con agua potable. Hoy y gracias a esta solución de potabilización, la calidad de vida mejora significativamente en torno a su salud y mejora también significativamente las condiciones que van a tener para poder atender con una mejor disposición y con mejor atención sus deberes escolares”, dijo, Yonh Carrillo, rector de la Institución Educativa Rural Caribia sede Centro Educativo Rural Alto Carito.
Promoviendo la educación Desde el nacimiento de la Fundación Luker en 1994, la entidad se propuso crear y promover programas de educación con el objetivo de mejorar las habilidades y competencias de los estudiantes en todo el país, implementando modelos que involucran a diferentes actores en el proceso de aprendizaje, como docentes, familias y el sector productivo. Esta misión le ha permitido desarrollar programas como Escuela Activa que solo durante el 2022 impactó a 20.000 estudiantes de todo el país, con el que se promueve la adquisición de competencias sociales y emocionales, por medio de la implementación de pedagogías activas. Además, la Fundación y Luker Chocolate han adelantado alianzas estratégicas con entidades públicas y privadas de todo el país, con el fin de seguir cumpliendo con su objetivo.
“Dentro de las necesidades que detectamos en las comunidades era la escasez de agua y de potabilización del agua. Por eso hemos venido mejorando y trabajando por darlesolución en esta problemática y acabamos de instalar en Alto Carito una solución, y para este objetivo, encontramos un aliado fundamental como lo es la Fundación EPMque son expertos en este tema y que han hecho un trabajo maravilloso, con el que la Fundación Luker y Chocolate Luker quedan extremadamente contentos” dijo Andrea Muñoz, asistente de proyectos de la Fundación Luker.
El Sueño de Chocolate Esta iniciativa se enmarca en “El Sueño de Chocolate”, el plan colaborativo de sostenibilidad de Luker Chocolate con el que la empresa busca transformar la cadena de valor del cacao desde el origen, con el que se impactó positivamente a más de 3.000 familias en 2022. Este plan tiene una visión a largo plazo para mejorar el bienestar, proteger el ambiente, y aumentar los ingresos de los productores de cacao y comunidades. El Sueño de Chocolate reúne diferentes actores como actores como clientes de Luker, ONGs, academia y gobierno local, para construir bienestar sostenible en las comunidades rurales de Colombia.
Fidel Nieto Plata, coordinador regional de Abastecimiento de Cacao y Sostenibilidad de Luker Chocolate aseguró que “porque entendemos que el desarrollo de las empresas tiene que ir en paralelo al desarrollo de las comunidades donde tenemos influencia directa, nos animamos a contribuir con la instalación de esta solución de potabilización de agua en el centro educativo. Queremos trabajar al lado con entidades como la fundación Luker y la Fundación EPMporque sabemos que juntos llegamos más lejos”.
Más agua para la educación Con la entrega de la solución de potabilización en el de la Institución Educativa Rural Caribia sede Centro Educativo Rural Alto Carito, la Fundación EPM sigue cumpliendo con la tarea que se trazó de llevar agua potable a las comunidades educativas que más lo necesitan en los departamentos en los que tiene presencia del Grupo EPM como Antioquia, Santander, Quindío, Cundinamarca, entre otros. La Fundación logra cumplir este sueño de las comunidades a través del programa Agua para Educación, Educación para el Agua, que se transforma en una herramienta fundamental para el cumplimiento de los Objetivos para el Desarrollo Sostenible (ODS) 4: Educación de calidad y 6: Agua limpia y saneamiento.
“En la Fundación EPM llegamos al municipio de Necoclí en el departamento de Antioquia. En esta oportunidad, entregamos a la comunidad del Centro Educativo Rural de Alto Carito una solución de agua potable para mejorar su calidad de vida, esto gracias a la alianza con Fundación Luker y Casa Luker, que nos permitió no solamente llegar con agua potable, además estamos desarrollando de un proceso de fortalecimiento organizativo de las personas de la zona y también un proceso de conservación de ecosistemas estratégicos en este territorio, con el fin de generar conciencia en torno al cuidado y como contrarrestar los efectos negativos del cambio climático, porque en la Fundación EPM Educamos para el Desarrollo Sostenible”, indicó Jubert Palacio, director de proyectos de la Fundación EPM.
Cada año aumenta el número de familias que mejoran su calidad de vida gracias al programa Agua para la Educación, Educación para el Agua de la Fundación EPM. Hasta la fecha la Fundación ha llevado 811 soluciones de potabilización a comunidades educativas rurales en los municipios donde tiene presencia el Grupo EPM desde el 2011, beneficiando a más de 96.000 personas.